Siento con gran claridad que nuestros procesos requieren de involucrar al cuerpo.
“Tu cuerpo sabe”. En él se alberga tu historia, tus memorias… Se trata de ir aprendiendo a escucharlo, a discernir, a familiarizarte con su lenguaje, a acompañarte, para poder crear una relación tan íntima contigo que te apetezca cuidarte y que te permita relacionarte de manera más amable y respetuosa contigo y con el entorno. Y eso se construye día a día.
Por lo general, un sistema nervioso alterado durante años, sobreestimulado y en alerta, requiere de escucha profunda. Como en cualquier relación, crear una base sólida con una misma necesita de tiempo, paciencia, constancia, compasión, respeto, escucha, honestidad y mucho amor.
Hablamos de una nueva manera de vivir, de relacionarte con la vida, desde la conexión con tu cuerpo.
En una sociedad que necesita estímulos fuertes para sentir, adicta a la intensidad, se nos ha olvidado el poder de los actos sencillos y del descanso.
Y el descanso no siempre implica quietud, puede darse también desde el movimiento. Lo que requiere el descanso es bajar al cuerpo, es bajar el ritmo, es presencia, en quietud y en movimiento.
Pararse a sentir no es algo que esté valorado o que nos hayan enseñado. En mi caso, está siendo el camino de regreso a mí.
Y es desde esta mirada que te ofrezco mi acompañamiento, porque “la letra, con amor, entra mejor”.
Podría explicarte muchas cosas…
Pero, en resumen, la finalidad de lo que te comparto es:
Regresar al cuerpo, para regresar a ti
Que puedas conocerte más, para acompañarte, regularte y cuidarte desde la sencillez
Que puedas hacerlo disfrutando del proceso, de manera amable
¡Ni te imaginas lo que estas tres cosas pueden hacer por ti!
Si quieres conocerte y reconectar con tu cuerpo
Si sientes que tu sistema nervioso está desregulado y quieres volver a sentir seguridad, aprender a acompañarte, sentirte y regularte
Si sientes mucha carga emocional en tu cuerpo
Si vives con dolor, ansiedad, tensión, estrés…
Si sabes que necesitas moverte y sientes dolor al hacerlo
Si quieres movilizar el cuerpo desde un lugar amable y seguro
Si eres muy mental y no sabes cómo bajar al cuerpo
Si sientes que necesitas bajar el ritmo, aprender a parar, a cuidarte
Si sientes tu energía baja y quieres mejorar tu vitalidad
Si quieres abrir, nutrir y liberar el cuerpo
Si te exiges demasiado, no pones límites y antepones las necesidades de los demás a las tuyas
Si quieres cultivar la escucha y la presencia
Si quieres recuperar tu poder, tu soberanía
Si simplemente, quieres disfrutar del descanso, del movimiento consciente, sentirte y dedicarte tiempo para ti de calidad…
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